LA CONVOCATORIA

Perteneciente a la Junta Mayor de Cofradías, Hermandades y Mayordomías de Semana Santa, es el tercio que tradicionalmente inicia y anuncia los desfiles pasionales (a excepción de las procesiones de Las Palmas, Jueves y Sábado Santo).

Esta compuesta por dos partes:

Por un lado, la compone el paso, obra de los orfebres oriolanos Luis y Benedicto Martínez (1978). La Convocatoria representa un calvario vacío, un pequeño montículo con una cruz de la que cuelga un trozo de lienzo y sobre la que apoyan dos escaleras. El conjunto está cubierto por un pequeño techo a modo de capilla sostenido por cuatro columnas, rematado en su parte superior por el cáliz con la Sagrada Forma. En el trono aparecen reflejados los escudos de todas las Cofradías, Hermandades y Mayordomías, y de él cuelgan decenas de campanillas que cuando pasa por calles adoquinadas le confieren un tintineo inconfundible. En su interior se acoplan dos largas bocinas conocidas como “las Gemelas”, denominadas así por ser iguales. Hay dos juegos de bocinas, las de la Orden Franciscana Seglar (datadas del siglo XVII) y las de la Junta Mayor (de finales de los años 90).

Por otro, La Convocatoria la compone el conjunto musical en sí; formado por la bocina, los clarines, los tambores y las propias gemelas, cuyos intérpretes desfilan ataviados con vestas de color granate y marfil.

Mientras va andando la procesión, los tambores suenan a ritmo acompasado. Una vez paran los tambores, empieza una secuencia la bocina, un largo instrumento negro de sonido grave donde el intérprete ha de hacer un gran alarde de resistencia pulmonar para advertir la cercanía de la procesión. Tras este toque, intervienen los clarines seguido de las propias gemelas, cuyos sones son tan característicos y populares en Orihuela, que llegan al corazón de todos los oriolanos. Para concluir dicha secuencia, intervienen los tambores ejecutando una serie de golpes donde se puede introducir la siguiente frase: “¡A Jesús lo van a matar!”